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En los últimos años, ha habido un cambio notable en la industria musical: un número creciente de artistas decide lanzar su propia música bajo sus propios sellos discográficos en lugar de depender de las grandes discográficas tradicionales. Esta tendencia, que comenzó con artistas independientes, ahora incluye a grandes nombres de la música que buscan tener un mayor control sobre sus carreras y sus creaciones. Pero, ¿qué motiva a los artistas a dar este paso?
En este blog, exploraremos las razones detrás de esta tendencia y los beneficios que los artistas obtienen al crear sus propios sellos discográficos.
Una de las principales razones por las que los artistas están creando sus propios sellos discográficos es para tener un mayor control creativo sobre su música. Bajo los contratos tradicionales con grandes discográficas, los artistas a menudo tienen que ceder el control de sus grabaciones, lo que significa que la discográfica decide cuándo y cómo se lanzan las canciones, qué canciones se incluyen en un álbum, e incluso qué dirección artística debe seguir el artista.
Al crear su propio sello, los artistas pueden tomar todas las decisiones relacionadas con su música. Esto les permite experimentar con su sonido, lanzar música cuando lo deseen y mantener la integridad artística de su obra.
Además del control creativo, tener un sello propio también permite a los artistas ser dueños de sus grabaciones. En un contrato tradicional, la discográfica suele ser la propietaria de las grabaciones maestras, lo que significa que controla cómo se utilizan esas grabaciones y recibe la mayor parte de las regalías generadas por ellas. Al tener su propio sello, el artista retiene los derechos de sus grabaciones, lo que les permite obtener una mayor parte de las ganancias y decidir cómo se explota su música.
Otra razón clave para crear un sello propio es la libertad financiera que conlleva. Cuando los artistas lanzan música a través de su propio sello, no tienen que compartir las ganancias con una discográfica tradicional. Esto significa que, aunque pueden enfrentar mayores costos iniciales al producir y distribuir su música, a largo plazo, pueden obtener una mayor parte de las regalías y otros ingresos generados por su música.
Además, al ser dueños de sus grabaciones y no tener que cumplir con las condiciones impuestas por una discográfica, los artistas pueden explorar diferentes fuentes de ingresos. Pueden negociar acuerdos de licencia, sincronización y distribución de manera más favorable, asegurando que la mayor parte del dinero generado por su música regrese a sus bolsillos.
Karol G es un ejemplo reciente de un artista que ha optado por esta ruta. Con su sello Bichota Records, Karol G ha tomado el control de su carrera musical, manteniendo una relación de colaboración con Interscope, pero sin ceder los derechos de sus grabaciones. Esto le ha permitido maximizar sus ingresos y tener la libertad de dirigir su carrera según sus propios términos.
Crear un sello discográfico propio también ofrece a los artistas la posibilidad de innovar en cómo distribuyen y comercializan su música. Las plataformas de streaming y las redes sociales han democratizado la distribución de música, permitiendo a los artistas llegar directamente a sus fans sin la necesidad de intermediarios. Los sellos discográficos propios permiten a los artistas explorar nuevas estrategias de marketing y distribución que pueden estar más alineadas con su visión y con las expectativas de sus fans.
Con un sello propio, los artistas pueden implementar estrategias de marketing directo, como campañas en redes sociales, lanzamientos sorpresa, o colaboraciones estratégicas, que pueden ser más difíciles de realizar bajo una gran discográfica. Esta flexibilidad permite a los artistas mantener una conexión más cercana con su audiencia y reaccionar rápidamente a las tendencias del mercado.
Finalmente, tener un sello discográfico propio también permite a los artistas diversificar sus actividades y ampliar su marca. Un sello propio no solo es una plataforma para lanzar música, sino que también puede convertirse en un vehículo para otros proyectos creativos y empresariales. Los artistas pueden firmar a otros talentos, lanzar proyectos especiales, o incluso explorar otras áreas como la moda, el cine o la producción de contenido digital.
Artistas como Rauw Alejandro han utilizado su sello, Los Sensei, no solo para lanzar su música, sino también para apoyar y promover a otros artistas. Esto no solo diversifica sus fuentes de ingresos, sino que también les permite tener un impacto más amplio en la industria musical al ayudar a otros artistas a alcanzar el éxito.
La creación de sellos discográficos propios es una tendencia que está redefiniendo la industria musical. Los artistas buscan cada vez más tener control total sobre su música, sus finanzas y la dirección de sus carreras. Esto les permite mantener la integridad artística, maximizar sus ingresos y explorar nuevas oportunidades en un mercado musical en constante evolución. A medida que más artistas toman este camino, es probable que veamos una transformación continua en la forma en que la música es creada, distribuida y consumida.